domingo, 29 de noviembre de 2009

La ermita de la Virgen del Monte y el "Camiño Brieiro"

En las inmediaciones del límite común de los ayuntamientos de Nogueira de Ramuín y Esgos, o lo que viene a ser lo mismo, de los antiguos cotos jurisdiccionales de los monasterios de San Esteban de Ribas de Sil y San Pedro de Rocas, se encuentra la ermita de la Virgen del Monte.

Cuenta la leyenda que la imagen de esta Virgen

fue encontrada en la llamada fuente de la Virgen del Monte, situada en el camino que sube desde Xaravedra, por un hombre que se dedicaba a rozar el monte. A la hora de construirle una capilla, surgió -no se sabe por qué- una disputa entre pueblos sobre el lugar en donde edificarla. Por una parte estaban Xaravedra y Pardeconde, pertenecientes a la jurisdicción de San Pedro de Rocas, y por otra parte, Loña del Monte, perteneciente a la de San Esteban de Ribas de Sil. Se decidió poner la imagen en un carro tirado por bueyes, dejarlos a su libre albedrío, y construir donde parasen. La suerte favoreció a los de Loña, y la ermita está en su feligresía a pesar de que la imagen apareciese en territorio de Xaravedra.

La fecha en que se llevó a cabo la construcción a la que alude la leyenda, me es desconocida. El edificio actual es de 1730, según una inscripción que hay en el lado izquierdo de la puerta, pero existen documentos anteriores a esa fecha, entre ellos uno de 1509 (citado en la página 285 del libro de Emilio Duro Peña sobre el monasterio de San Pedro de Rocas), en los que se menciona la ermita.

Este lugar y sus inmediaciones constituye un cruce de caminos que fueron importantes vías de comunicación hasta época relativamente reciente. Los dos más destacados y de mayor trascendencia histórica, son el que viene de la parte de Gomariz y va hacia la Cabeza de la Meda, y el que sube de la zona de Pardeconde y baja hacia el Sil por Villar de Cerreda. Nos ocuparemos brevemente ahora del primero, pero los dos aparecerán de nuevo, y con mayor amplitud y más datos, en posteriores entradas del blog.

El camino en cuestión (de la zona de Gomariz hacia la Cabeza de la Meda) pasa exactamente al lado de la ermita. En los pueblos de la vertiente norte de la sierra se le conoce con el nombre de “Camiño dos Carboneiros”, mientras que en la otra vertiente, le llaman “Camiño Brieiro”. Tiene la particularidad de que señala el límite del ayuntamiento de Nogueira de Ramuín con el de Esgos, primero, y con el de Xunqueira de Espadañedo, después.

Subiendo por él desde la ermita, se llega al llamado “Campo da Tella”, en donde se cruza con el otro camino que hemos mencionado. Allí gira hacia la derecha y va por donde está ahora el cortafuegos hasta “o fondo da Costa da Sela”. Desde allí sube, dejando a su izquierda los “Outeiros da Costa da Sela” (también llamados "As penas de Millán"), hacia las “Llamagorzas de Chao de Ramiscas”, continuando luego por el cortafuegos hasta el “Marco Novo”.

El “Marco Novo” es una piedra vertical de 190 centímetros de altura y 125 de contorno, con multitud de cruces grabadas por todas partes: al menos doce. Según el Mapa Topográfico Nacional, en este marco se juntan los ayuntamientos de Nogueira de Ramuín, Esgos y Xunqueira de Espadañedo. Pero esto que dice el Mapa Topográfico Nacional, es falso. Lo que de verdad señala este marco es, simplemente, que por aquí va el límite de Nogueira de Ramuín y Esgos. La demostración completa de esta afirmación que acabo de hacer, está en mi artículo “Vía Romana de Astorga a Orense por el castro Litoria" (publicado en el número XXV, año 1997, del "Boletín Auriense”) y será expuesta en la siguiente entrada del blog. Por ahora sólo diré que la delimitación que aparece en el Mapa Topográfico Nacional, no tiene ni pretende tener validez ni efecto legal alguno. ¿Por qué digo esto? Porque en un documento del año 1934, que me fue mostrado en la Casa do Concello de Nogueira de Ramuín en agosto de 1995,


se dice que cuando los vecinos de los ayuntamientos de Nogueira de Ramuín, Parada del Sil, Esgos y Xunqueira de Espadañedo fueron requeridos para informar de los límites de sus ayuntamientos, con vistas al levantamiento del Mapa Topográfico Nacional, no consiguieron ponerse de acuerdo, y por ello la división que aparece en el mapa se fijó arbitrariamente. Lo que dice textualmente el documento es: “No habiendo conformidad entre los señores representantes de los ayuntamientos antes citados, respecto a la situación del mojón común a los términos municipales de Nogueira de Ramuín, Parada del Sil, Esgos y Junquera de Espadañedo, ni en su posesión de hecho ni en la de derecho, se describe este y se hace presente a los señores representantes de los citados ayuntamientos, que se elegirá sin intervención de ninguno de ellos un mojón de cuatro términos provisional, el cual no tendrá más efecto que el de la medición planimétrica, sin que pueda perjudicar en ningún caso las reclamaciones que tengan presentadas o traten de presentar los ayuntamientos mencionados”.

Una vez dicho esto, prosigamos por el “Camiño Brieiro” en dirección a la Cabeza de la Meda. En primer lugar encontramos una zona semipantanosa llamada “As llamagorzas dos Chaos” y luego la “Fonte do Machado”, que queda justo en el borde izquierdo del camino. Más adelante se llega al “Outeiro dos Cachos” (en donde según tradición conservada en los pueblos de Pardeconde y Xaravedra, se celebraba antiguamente una “feira de mouros ou de romanos”), y un poco más allá está, en el borde izquierdo del camino, el “Marco Vello”.

El “Marco Vello” es una piedra vertical de 150 centímetros de altura y otros tantos de contorno, de forma no del todo cilíndrica ya que la cara que da al camino es plana, y tiene tres cruces: una hacia la Cabeza de la Meda, otra hacia la parte opuesta, y otra hacia el Sur, es decir, hacia el camino. Según el Mapa Topográfico Nacional, en este marco se juntan los ayuntamientos de Nogueira de Ramuín, Parada del Sil y Xunqueira de Espadañedo. Esto vuelve a ser falso. Lo que de verdad señala este marco es la confluencia de los ayuntamientos de Nogueira de Ramuín, Esgos y Xunqueira de Espadañedo.

Siguiendo el “Camiño Brieiro”, se llega al Campo del Eirado, y allí es donde verdaderamente está el límite de los ayuntamientos de Nogueira de Ramuín, Parada del Sil y Xunqueira de Espadañedo. El punto exacto en el que se juntan los tres ayuntamientos, es donde sale del Campo del Eirado el camino antiguo que se dirigía a Couto y Paradellas por la ladera norte de la cabeza de la Meda, y cuya traza es perfectamente visible bajo la maleza que lo cubre.

El nombre de “Camiño dos Carboneiros” / “Camiño Brieiro” termina aquí, en el Campo del Eirado. Antiguamente había dos continuaciones posibles: por un lado, ese camino que decimos que se dirigía a Couto y Paradellas, y por otro, el que seguía hacia la ladera occidental de la Cabeza de la Meda, e iba a Xunqueira de Espadañedo y otras partes. El más importante es, como veremos en la siguiente entrada del blog, el que se dirigía a Couto y Paradellas.

Precisemos (con la ayuda de dos fotos) a qué camino exactamente nos estamos refiriendo. Situándose en la pequeña cuesta que desde el “Marco Vello” baja hacia el Campo del Eirado, se distinguen claramente entre la vegetación las estelas de tres caminos que van hacia el Norte por la ladera de la Cabeza de la Meda, siendo las cortaduras de los tres perfectamente visibles en el perfil de la montaña:

El más alto de ellos arranca a unos 150 metros más arriba del Campo del Eirado, y va subiendo a medida que bordea el monte hasta llegar a la cumbre por la parte opuesta. El más bajo, es la pista asfaltada, construida hace unos diez años, entre Xunqueira de Espadeñado y Teimende. El camino del medio es el que se dirigía a Couto y Paradellas, y aunque en esta primera foto va por encima de la pista asfaltada, su comienzo (en el Campo del Eirado) es más bajo que ella, por lo que la cruza en algún punto, como se adivina en la segunda foto:

Precisado esto, añadamos que la línea divisoria entre Nogueira de Ramuín y Parada del Sil, a partir del Campo del Eirado, va por este camino de Couto y Paradellas hasta el punto de la ladera norte de la Cabeza de la Meda en que se produce el cambio de vertiente. (Del camino para abajo es de Nogueira de Ramuín; del camino para arriba es de Parada del Sil.) Desde ese punto del cambio de vertiente, la línea divisoria baja derecha a “Augas Boas”, que es una zona en la falda de la montaña en las proximidades del punto kilométrico 28.5 de la carretera de Orense a Parada del Sil.

A continuación pondremos un mapa de la zona (correspondiente a la página 188 del Mapa Topográfico Nacional, 1ª edición, año 1944), en el que se ha señalado en verde el “Camiño Brieiro” y su continuación hacia Couto y Paradellas hasta el punto de cambio de vertiente en la ladera norte de la Cabeza de la Meda:

Y finalizaremos con unas líneas de información turística. A la ermita de la Virgen del Monte se puede acceder en coche por la pista asfaltada que sube desde Loña del Monte (en la carretera de Esgos a Luintra). Desde aquí hasta la Cabeza de la Meda no hay asfalto, pero a la zona del Eirado se puede subir, bien desde Xunqueira de Espadañedo (en la carretera de Orense a Trives), o bien desde Teimende (en la carretera de Villarino Frío a Parada del Sil). Este último ascenso es muy recomendable. Como ejemplo de las vistas sobre el cañón del Sil desde la ladera norte de la Cabeza de la Meda, véase la siguiente foto:

En las proximidades del Campo del Eirado están las llamadas “casas de la nieve”, o “pozos de la nieve”, de los monasterios de Xunqueira de Espadañedo y San Esteban de Ribas de Sil. Se trata de unos recintos subterráneos en donde se conservaba la nieve desde el invierno hasta la época estival, en que era transportada (de noche y a lomos de mulas) a la ciudad de Orense para refrigerio de sus habitantes más adinerados. Para llegar al pozo correspondiente a Xunqueira, se sube desde el Campo del Eirado por el cortafuegos en dirección sur durante unos 200 metros, y desde allí se gira a la derecha y se camina unos 30 metros por el bosquecillo de abedules en cuyo centro se encuentra. Lo que se ve allí actualmente es un pozo semicircular totalmente descubierto, de algo más de dos metros de profundidad y unos siete de diámetro, construido en sillería de granito.

Delante de él están los restos de una construcción cuadrada de unos tres metros de lado, cuyos muros tienen cincuenta centímetros de anchura y algo más de un metro de altura. Según la versión del guarda forestal, esta construcción fue hecha, en época relativamente reciente y con la piedra que cubría el pozo, por un vecino de no recuerdo qué pueblo cercano, para que le sirviese de cuadra para el ganado. Los pozos correspondientes a San Esteban, son dos, y están situados a unos trescientos metros del Campo del Eirado hacia el otro lado del camino, en la parte más alta de la margen izquierda del barranco de Porto dos Carros. Según parece, estos aún se hallan intactos, pero la maleza que hay por ese lado hace que no sean fácilmente accesibles. © Antón Rodicio 2009.

viernes, 20 de noviembre de 2009

El puente de Couceliñas


El puente de Couceliñas está situado sobre el río Mao, entre las parroquias de Pradomao y Piedrafita, poco antes del inicio del profundo cañón que forma el río al desembocar en el Sil. Fue descubierto para la civilización en mi artículo “Vía romana de Astorga a Orense por el castro Litoria”, publicado en el número XXV del Boletín Auriense, en 1997, pero la civilización no se ha dado por aludida. Han pasado doce años y ningún organismo, público o privado, ha hecho nada por este importante monumento del pasado, que como se aprecia claramente en las fotos, se cae literalmente a pedazos. La única diferencia que yo veo en estos doce años, es que ahora forma parte de una ruta de senderismo, y por eso su acceso está limpio de maleza.

Desconozco quien lo ha incluido en una ruta de senderismo, pero sin ánimo de causar alarma, me parece un poco temerario que así haya sido (y creo que lo mismo le parecerá a cualquiera que se sitúe debajo de él y mire hacia arriba). Este puente necesita una remodelación antes de poder ser usado con total tranquilidad; necesita que alguien que tenga poder para ello, se acuerde de él y haga algo por su conservación. Quien eso haga, estará haciéndolo por una parte de la historia de Galicia; pues aunque no aparece en documentos escritos (o al menos yo no los he localizado, pero quizás haya algo en la documentación completa del Monasterio de Montederramo, que espero que el profesor Ramón Lorenzo Vázquez publique alguna vez), se trata de un puente históricamente importante, como en esta y en otras entradas del blog señalaré.

Para empezar, sus medidas no son las de un puente ordinario. La anchura de su bóveda es de cuatro metros y medio, y esto lo hace excepcional entre los puentes medievales de Galicia. En efecto, de la información proporcionada por Carlos Nardiz Ortiz en la página 200 de su libro “El territorio y los caminos en Galicia”, se deduce que salvo el puente de San Francisco de Ribadavia, ningún otro es tan ancho como él.

¿Qué camino o caminos acordes con la importancia que su anchura le concede, pasaron por este puente? ¿Cuáles justificaron su construcción?

En la página 340 del libro de Emilio Duro Peña sobre el monasterio de San Esteban de Ribas de Sil, aparece una carta foral del año 1407, en la cual se habla de un camino de Castro Caldelas a Orense pasando por la parroquia de Santiago de Cerreda: “Vos aforamos o nosso lugar de Casdende, que e suu syno de Santiago de Çerreda, de lo camino que ven do Castro de Caldelas para Ourense afondo como ven por la pena de Çernada a dereito o porto de Casdende por u pasan as bestas e os carros afondo contra Çerreda e contra Giestosa”. Este es uno de los caminos de los que formaba parte nuestro puente. No es el único: hay otro más antiguo y posiblemente más importante, pero ese otro es más complicado de tratar y nos ocuparemos de él en una entrada posterior del blog, reservando la presente para el que acabamos de mencionar.

Distinguiremos cuatro tramos: de Orense a San Esteban de Ribas de Sil, de San Esteban a Caxide, de Caxide al puente de Couceliñas, y del puente de Couceliñas a Castro Caldelas.

El primer tramo lo recorrió el Padre Sarmiento el día 15 de diciembre de 1745, a la vuelta de su primer viaje de Madrid a Galicia, dejándonos su itinerario: Orense-Castadón-Puente de Castadón (sobre el río Loña)-Pereiro de Aguiar-Prexigueiró-Llanada del Carpazal y Ermita de Nuestra Señora-Faramontaos-Eiradela-Luintra-Viduedo-San Esteban.

El siguiente tramo es el que se usaba para ir del monasterio de San Esteban al de Santa Cristina de Ribas de Sil, y el que las gentes de los pueblos de Viluje, Cerreda, Villar de Cerreda, etc., conocen aún hoy como “Camiño Real”. Desde San Esteban, va por Loureiro y Villar de Cerreda, y a continuación por Alberguería y Cerreda, aunque de estos dos lugares pasa retirado, a unos 200 metros. Sube después por el medio del pueblo de Viluje y llega hasta Caxide, desde donde aparta un ramal a la izquierda hacia el monasterio de Santa Cristina.

Desde Orense hasta Caxide sigue de forma aproximada la dirección de la actual carretera de Orense a Parada del Sil (construida en torno a 1924), aunque apartándose completamente de ella entre Prexigueiró y Faramontaos y entre Loureiro y Viluje. A partir de Caxide, abandona totalmente esa carretera, girando a la derecha: Requián- Teimende-Fiós-Forcas-Puente de Couceliñas.

El último tramo: Couceliñas-Castro Caldelas, es el único que puede presentar alguna duda (concretamente en las proximidades del puente), así que iremos paso a paso.

Saliendo del puente por la margen derecha del río, había en épocas recientes (y aún hoy, pero cubiertos por la maleza) dos caminos: uno hacia la derecha y otro hacia la izquierda. El de la derecha serpentea por la ladera de la loma que hay enfrente del puente, hasta subirla, para continuar después hacia Praducelos. El de la izquierda, por su parte, era el que en épocas recientes (digamos hasta la década de los 70 del siglo pasado) usaban las gentes de la margen izquierda del Mao para dirigirse a la zona de Castro Caldelas. Sigámoslo.

A la salida del puente va circundando el monte por la izquierda, subiendo primero, llaneando después y bajando finalmente hasta el regato Avelaibas, que ya está en la otra vertiente. El regato es de poco caudal y, salvo en época de crecidas, lo atravesaban los carros sin necesidad de puente alguno. A partir de aquí comienza a subir hacia A Veiga das Cruces, que es un descampado 700 metros al norte del pueblo de A Veiga (según señalización en la carretera) en el que hay una depuradora de aguas. Prosigue hacia el Este coincidiendo un pequeño trecho con la carretera de La Teixeira a Sistín, abandonándola en un sitio llamado Pazos, al lado de un poste de tendido eléctrico que tiene un transformador. Sigue luego recto, dejando a la izquierda los pueblos de Quintela de Abajo y Quintela de Arriba, y continúa por Val de Meixide y Agro de Quintela, y por Casa del Monte y Aguil, a Castro Caldelas.

El único inconveniente que tiene el trayecto que se acaba de indicar, se refiere al trozo comprendido entre el puente de Couceliñas y el regato Avelaibas. En su mayor parte está inaccesible por la vegetación, pero desde A Veiga das Cruces se puede llegar (o se podía al menos en 1995, que fue cuando yo estuve allí recogiendo datos para el artículo antes citado), retrocediendo el camino, hasta la última parte y examinar la bajada hacia el regato Avelaibas. Se aprecia entonces no sólo que el camino actual es muy estrecho, sino que, por el estado que presenta la ladera del monte, es imposible que haya podido sobrepasar los dos metros de ancho en ninguna época pretérita. Además, los vecinos de los pueblos cercanos, coinciden en señalar que ese trozo, sobre todo la subida a la salida del puente, era dificilísimo para el paso de los carros. Todo eso es incompatible con la importancia del puente y del camino de Castro Caldelas a Orense, así que debemos abandonar la hipótesis de que dicho camino saliese del puente hacia ese lado. Pero la salida hacia la derecha, para subir a Praducelos, no tiene tampoco ningún sentido.

Afortunadamente hay una tercera posibilidad. Existe entre las dos lomas que forman el monte de la margen derecha del río, una encañada que está casi exactamente en frente del puente, y que aunque no pasa desapercibida, es imposible acceder a ella por la maleza que cubre esa zona. Pero en el verano de 1995, un incendio había despejado en parte el lugar, y pude llegar a él subiendo desde el regato Avelaibas. Lo que vi allí me resultó un poco desconcertante al principio. Aunque hay paredes transversales delimitando propiedades, también hay claros indicios de que la encañada ha sido ensanchada artificialmente, y tiene amplitud suficiente (más de cuatro metros) para que por allí pasase el camino que estamos tratando. La pendiente de subida desde el puente es muy pequeña, y la pendiente de bajada hacia el regato es suave al comienzo, pero se llega a un punto (a unos 150 metros del arroyo), después de haber salido ya de la encañada, en que el descenso se hace vertiginoso (pendiente del 30% o más), haciendo inviable seguir por allí. Pero la continuación está, afortunadamente, clara: en ese mismo punto se puede girar a la derecha, por unos prados en cuya pendiente sobre el arroyo aún no se ha borrado del todo la franja horizontal por la que con toda seguridad iba el camino, y prácticamente en llano, alcanzar el regato unos pocos cientos de metros aguas arriba. Allí habría seguramente un pequeño puente (una pasarela), del que no se conservan vestigios, y a continuación, siguiendo por donde ahora están los prados de la otra vertiente, también en llano se llegaba al camino antes mencionado, a poca distancia ya de A Veiga das Cruces.

Ahora que la descripción del recorrido del camino entre Orense y Castro Caldelas está completa, daré un par de datos en apoyo del trazado indicado entre Caxide y Castro Caldelas (tan discrepante de la actual configuración de carreteras de la zona). En primer lugar, este era el camino que seguían, hasta hace menos de cincuenta años, los vecinos de Cerrada, Viluje, etc., cuando llevaban su ganado a la feria de Castro Caldelas. En segundo lugar, no nos debe inducir a error la pretensión de ciertos autores (expertos en inventar caminos sin moverse de su despacho) de continuar el camino antiguo, desde Caxide, por Parada del Sil hacia la ribera: Chandrexa-Sacardebois-San Lorenzo-Cristosende-La Teixeira-Ivedo-Castro Caldelas. Fácil es convencerse de que este no es el trayecto adecuado: no hay más que ver las innumerables vueltas, con subidas y bajadas continuas, que necesita la actual carretera para salvar los profundos valles que forman los sucesivos arroyos antes de despeñarse en el Sil. Además, donde hoy está la carretera desde Parada del Sil a Sacardebois, no había aún en 1914, en palabras de Joaquín Arias Sanjurjo (ver su artículo “Una excursión a la Ribera Sagrada”, pag. 50) más que “un estrecho camino abierto en la ribera del Sil”. Y para imaginarse el estado real de dicho camino, es suficiente la siguiente noticia que las gentes de Forcas oyeron contar a sus mayores: cuando se construyó la fábrica de la luz de Barjacova, que aún puede verse en la margen izquierda del Mao en las proximidades de su desembocadura en el Sil, se llevaron allí los materiales, no por Parada del Sil o Castro Caldelas, sino que fue preciso bajarlos desde Forcas por la zona de San Víctor; incluyendo las turbinas, en un "carretón" construido al efecto.

Digamos, ya para terminar, que el camino de Castro Caldelas a Orense que acabamos de describir, no fue sólo un “Camiño Real”, sino realmente un camino de reyes. De la colección diplomática del libro de Duro Peña antes citado, se sigue que el rey Alfonso IX de León, estuvo varias veces en el monasterio de San Esteban de Ribas de Sil, y la única ruta por la que desde León pudo haber llegado a ese monasterio, es la que hemos indicado. En la actualidad, ya en muy pocos sitios conserva ese camino su configuración primitiva, pero donde esto ocurre, se aprecia claramente su importancia. Circulando, por ejemplo, por la carretera de Orense a Parada del Sil, en la primera curva después del arroyo de San Esteban se le ve subir paralelo a la carretera durante unos 200 metros por el exterior de la cerca del convento. Está totalmente empedrado, y su anchura no baja de los tres metros y medio.

Déjeseme finalizar con la esperanza de que el puente de Couceliñas tenga con el presente escrito, más suerte de la que tuvo con el de doce años atrás, y alguien haga algo por su conservación antes de que sea demasiado tarde. © Antón Rodicio 2009.